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La señora Frisby y las ratas de Nimh







La señora Frisby, una ratoncita viuda con cuatro hijos pequeños, tiene que trasladar a su familia a su casa de verano inmediatamente, o enfrentarse a una muerte segura. Pero su hijo menor, Timothy, yace en cama con neumonía y no puede moverse…
Un encuentro afortunado con las ratas de NIMH, un extraordinario grupo de criaturas de inteligencia muy desarrollada, le planteará una brillante solución a su dilema.
"La señora Frisby y las ratas de NIMH" es una novela entrañable y un clásico imprescindible de la literatura juvenil. Entretenida y llena de humor, aventuras y personajes inolvidables, transmite valores tan importantes hoy en día como cuando se publicó por primera vez en 1971.
Páginas: 272 / Formato: 13 x 21 cm / ISBN: 978-84-666-4674-1

  Supe de este libro por mera casualidad. Estaba inmersa en la lectura de La princesa de los elfos (aquí podéis leer la reseña http://librosmagicossonadores.blogspot.com.es/2015/03/la-princesa-de-los-elfos.html ) y al final del libro venía una lista de otros títulos de la colección, entre ellos La señora Frisby y las ratas de Nimh.
   Inmediatamente me vino a la memoria la película de animación dirigida por Don Bluth de los años 80, El mundo secreto de la señora Brisby, que como veis cambiaron el título con respecto a la novela (en su momento ni se me ocurrió pensar que se basara en un libro). 

   No veo esta película desde niña (y ahora que he leído el libro no me queda ni pizca de gana de volver a verla por que el libro es muy superior a la adaptación) pero si me había quedado el recuerdo bonito de la película y aun que como acabo de decir, la lectura del libro ha borrado todo interés que pudiera tener de volver a visionarla en plan nostálgico, sin duda es la mejor obra de Don Buth (antes de empezar con la tortuosa e interminable serie de Piecito que nos muestra el motivo,  por el que los dinosaurios desaparecieron de la Tierra. El universo ya no podía soportar más a ese pequeño y repelente dinosaurio carente de hormonas de crecimiento XDD y decidió, y no se le puede culpar por ello, bombardear con meteoritos hasta acabar con Piecito y sus amiguitos, casi tan detestables como él XDD La muerte de los demás dinosaurios fue un daño colateral XDD Y mucho antes de la espeluznante adaptación de Anastasia con un Rasputín con poderes demoniacos y unos personajes infectados con la Cantitis Aguda Disnesiana. De modo, que a nadie que entienda un poco de animación puede extrañarle la desaparición de este director de 2D. Creo que el mundo le agradece que optara por dedicarse a otra cosa) aunque también sin duda está muy por debajo de la calidad de la novela.
   Las similitudes son básicamente que hay una ratoncita con un hijo enfermo, un cuervo, unas ratas venidas de Nimh y poco más. En la obra de animación se liaron a meter magia y el típico malvado, elementos que no aparecen para nada en la novela y ni falta que les hace.

   La señora Frisby y las ratas de Nimh, obra de Robert C. O´Brien fue publicada en 1971. O´Brien trabajó como redactor y periodista para la revista National Geographic, (Y eso se nota.  Cuando lees la obra te das cuenta de que el autor poseía grandes conocimientos sobre la vida animal) antes de tener que retirarse por enfermedad y dedicarse a la escritura de obras infantiles. En EE. UU. esta novela se considera un clásico infantil y lectura obligada en los colegios, no obstante, aquí no ha tenido la misma popularidad (y sin duda, no porque no se la merezca) ha sido editada varias veces (la última edición de manos de Ediciones B en el 2011, que es la que tengo yo) pero con  el tiempo este título  ha ido cayendo en el olvido e imagino que pocos ejemplares se venderán en la actualidad.
   Sin embargo, esta novela es absolutamente preciosa. La he devorado en solo día y medio (y son casi 300 páginas en letra más bien pequeñita).
   Está catalogada para niños de a partir de 10 años y efectivamente un chiquillo de esta edad y superior puede leerla y disfrutarla pero este libro da para mucho más y la recomiendo a cualquier adulto (y más si son amantes de los animales). Pero este libro sí que es un buen ejemplo, un clarísimo ejemplo, de uno de los prejuicios que existen en torno a la literatura infantil.
   Cuando un libro está protagonizado por animales (como es el caso) o por niños, desde la editorial al lector lo clasifica automáticamente como obra SOLO infantil. Y hay libros que si pueden entrar a este saco pero hay otros (como este título) en que meterlo en esta clasificación es cuartar enormemente el espectro de posible lector.
   Es verdad que esta novela está protagonizada por animales. Tenemos ratones, ratas,  un cuervo, un búho y una musaraña de mucho carácter pero no por ello son personajes ñoños o infantilones, ni mucho menos.

   Precisamente, uno de los puntos fuertes de La señora Frisby y las ratas de Nimh es que los animales son eso, animales. El autor no los ha humanizado. No van con ropita, no tienen casitas ricamente amuebladas y sobre todo no poseen el carácter y conducta de los seres humanos. Incluso el hecho de que las ratas sean tan inteligentes tiene una explicación, son así por las modificaciones que sufrió su ADN y se deja claro en el libro que piensan y actúan de modo diferente a las ratas normales.
   Hay libros en que la humanización de  los animales da como resultado obras magnificas, un claro ejemplo lo tenemos en el clásico El viento en los sauces, pero en otros casos se humaniza tanto al animal y sobre todo se le dota de todos los defectos que puede poseer  una persona (arrogancia, codicia, crueldad, etc.…) que al final lo que se obtiene es uno o varios personajes cabrones pero muy peludos XDD. Odio cuando pasa eso porque me chafa todo el libro (para leer Juego de Tronos en versión peluda leo el libro original y me ahorro las bolas de pelo XDD) y me resulta tremendamente ególatra el hecho de que cuando se plantea una raza evolucionada no humana se le dote de las mismas características y se les haga cometer los mismos errores como si al ser humano le resultara impensable el que otras criaturas evolucionadas pudieran hacer las cosas de modo diferente (y este es otro de los interesantes temas que trata esta novela).
   La señora Frisby y las ratas de Nimh habla de mucho más que de una ratoncita en apuros por que se acerca el tiempo de preparar la tierra para la cosecha y su casa está en medio mientras su hijo está enfermo.
   Si el lector es capaz de abstraerse del hecho de que la señora Frisby es una ratona y pensamos que es una ratona como podría haber sigo cualquier otro animal o… quizás una humana, lo que tenemos (por una parte) es el relato de una madre coraje. Porque eso es la señora Frisby, por encima de todo una madre, una madre que sola debe sacar adelante a sus cuatro hijos y que se encuentra en una terrible situación. Su hijo pequeño está gravemente enfermo y moverlo significaría su muerte. Incluso, en un momento dado, se ve ante la terrible perspectiva (que ninguna madre de la especie que sea quisiera verse en semejante tesitura) de que solo parece tener dos opciones: dejar morir a su hijo pequeño o perder a todos sus hijos (y perecer ella misma).
    Así nos encontramos ante el relato de una madre que se enfrenta a lo que sea con tal de salvar a su hijo y salvaguardar a los demás. Que supera los retos y miedos que haga falta, sin lloros, sin gritos y sin comeduras de coco tan propias de los humanos. Tiene que salvar a su hijo y todo lo demás es secundario (incluido su propio bienestar). Y para lograrlo tendrá que acabar por  solicitar la ayuda de las misteriosas ratas que viven no lejos de allí pero con las que los demás animales no tratan por lo extrañas que son.
   Y aquí, con las ratas de Nimh, entrelazando la historia de nuestra madre coraje el escritor aprovecha a tratar temas de una interesante profundidad (no muchos se plantean cosas así).

   O´Brien retrata los padecimientos de los animales de laboratorio (y eso que me temo que habrá animales que hoy en día sufrirán cosas mucho más aberrantes). Desde el punto de vista de las ratas vemos sus padecimientos, sus miedos y la falta de ética por parte de los humanos que por averiguar esto o aquellos no tienen ningún reparo en hacer sufrir a criaturas inocentes, sin por supuesto, molestarse en pensar en que les parecería a ellos que los secuestraran, les metieran en una jaula y les pincharan, electrocutaran y algunas cosillas más, en nombre de la ciencia.
   Así que si amáis a los animales esa parte del libro os indignara pero al tiempo veréis lo beneficioso que puede ser destapar esa oscura parte de la realidad que se desarrolla dentro de los laboratorios, en nombre de la ciencia o la cosmética.
   También, nos habla de la importancia del desarrollo intelectual a través de los libros. Las ratas de Nimh por medio de la experimentación que han sufrido han adquirido una gran capacidad cerebral. Pueden razonar e hilar pensamientos complejos. Pero eso, por si solo no te hace inteligente, la capacidad intelectual no es lo mismo que poseer conocimientos. Una vez que se posee la capacidad de aprender es el individuo el que ha de decidir si desea usarla (aprender) buscando los medios para adquirir conocimientos (en este caso los libros) o simplemente dejar apolillarse su cerebro (como a menudo parece que hacen muchos humanos).
   Las ratas de Nimh toman esta primera opción, son capaces de aprender y devoran todo libro que encuentran, deseosos de enriquecerse como individuos y como comunidad.
   Según avanzamos en la lectura nos encontramos con otro tema interesantísimo ¿Qué pasaría si otra raza no humana diera un salto evolutivo y de pronto fueran tan inteligentes o más que los hombres? (Esa raza que se autoproclama como raza superior y cuyos miembros tienden a creerse los amos del mundo).
   Esta cuestión dentro de los humanos ya se ha tratado. Aunque en las pelis de los X-men el mensaje de fondo quede eclipsado por los chicos guapos, las chavalas buenorras, los trajes ajustados y los poderes súper chulos, mega guays XDDD, por debajo de todo eso se pretendía plantear la hipótesis de que pasaría si hubiera dos especies humanas distintas. ¿Los humanos normales les aceptarían o les temerían?
   Como se ve en las películas, al final siempre pesan más los temores de la gente y en lugar de optar por emparejarse con esos macizorros para tener hijos súper majos con poderes y así fundir ambas especies. Pa que, mejor los perseguimos y nos montamos una buena guerrita, que eso mola más XDD Ya sabemos que lo de haz el amor y no la guerra al ser humano nunca le ha ido mucho XDD
   Pues aquí, el escritor nos muestra como las ratas de Nimh, que en muchos sentidos dan mil vueltas a los humanos, son conscientes (y acertadamente) de que los hombres jamás les aceptarían (a pesar de haber sido su propia creación) y que su única opción para sobrevivir es mantenerse apartados de los humanos y evitar por cualquier medio ser descubiertas. Saben que jamás serían aceptadas y acabarían de nuevo en un laboratorio o muertas. Esto, junto a otros motivos morales al final les lleva a tomar una difícil decisión y romper con todo.
   Y admitámoslo, si esto sucediera, si otra especie diera un salto evolutivo, el ser humano correría a exterminarla, si ya apenas dejan sobrevivir a los animales mucho menos aceptarían compartir el patio de recreo con otra especie inteligente. Y que luego resultaran más listos y más buenos que ellos (cosa que tampoco sería muy difícil XDD), ¡¡ni hablar!!
   Así que ya sabéis por que no nos visitan de otros planetas, saben que somos de temer XDD
   O´Brien nos presenta con las ratas de Nimh una especie que ha formado una comunidad inteligente, colaboradora, igualitaria y en la que los principios morales están por encima de todo. Y sobre todo es una especie que se compara con los humanos y deciden que no quieren ser como ellos, ni seguir sus costumbres, ni sobretodo cometer sus mismos errores. Ellas son ratas y harán las cosas a su manera. Y ya podríamos tener los humanos comunidades e individuos del nivel de estos pequeños animales que dan unas cuantas lecciones al lector. Desde la lealtad, la entrega, la sagacidad, el tesón o el coraje.
   Otro tema que se trata en el libro a través de las ratas de Nimh y estrechamente unido a esto último es como una sociedad puede estancarse evolutivamente y ni darse cuenta de ello. Esto mismo ven las ratas que les ha pasado a los humanos,  progresaron y luego pasaron de obtener logros para conseguir lo necesario para vivir a rodearse de banalidades para su comodidad, confundiendo eso con progreso (como ya os dije este libro fue escrito en 1971 pero no me diréis que no se puede aplicar perfectamente a nuestra era mega tecnológica) y ellos temen que les este sucediendo lo mismo y no quieren caer en ello.
   Hay una pequeña historia que Nicodemus, una de las ratas, le relata a la señora Frisby para explicarle esta situación y que creo que lo refleja a las mil maravillas. Me encantoó y por ello he querido reproducir ese fragmento:
   “Contaba la historia de una mujer, la señora Jones, que vivía en una pequeña ciudad. Un día compró una aspiradora. Hasta entonces ella, como el resto de sus vecinas, con una escoba y una fregona había mantenido su casa limpia como un espejo. Pero con la aspiradora lo hacía más rápido y mejor y, muy pronto, la señora Jones se convirtió en la envidia de todas las amas de casa de la ciudad…, hasta que ellas también compraron el aparato en cuestión.
   El negocio de aspiradoras tuvo tanto éxito que, de resultas, la compañía que las fabricaba abrió una filial en aquella ciudad. Una nueva fábrica consumía mucha electricidad, por supuesto, y también las mujeres con sus aspiradoras; por todo ello, la compañía eléctrica del municipio no tuvo más remedio que levantar una planta eléctrica más grande para satisfacer la demanda. En sus hornos se quemaba carbón y sus chimeneas vertían día y noche una negra columna de humo que cubría toda la ciudad de una gruesa capa de hollín y que hacía que los suelos de todas las casas estuviesen más sucios que nunca. Pero las mujeres de aquella ciudad, gracias a un trabajo redoblado, conseguían mantener sus suelos casi tan limpios como antes de que la señora Jones comprase la aspiradora.”
   ¿No es simplemente genial esta pequeña historia que de un modo tan sencillo retrata a la perfección como una especie puede pasar, sin darse cuenta, de la evolución a la involución?
   Otro elemento de esta historia rompe con otro de los tópicos de las novelas. Muchos lectores y escritores actuales están convencidísimos de que no se puede escribir una buena obra y entretenida sin la incorporación del villano o antagonista. Ya sea un sith, un nigromante, una horda zombie, un asesino en serie o una orden secreta que busca enriquecerse y controlar el mundo.
   Siempre he estado en contra de esta teoría tan difundida y en mis propios escritos procuro demostrar que es posible escribir una buena historia sin la incorporación de este antagonista. Me parece triste pensar que la gente ha interiorizado de tal modo el mal (y los personajes que los encarnarían) que son incapaces de imaginar un mundo sin estos componentes negativos.
   Y sin duda, este escritor demuestra al lector, que efectivamente, es más que posible hacer una buena historia, una excelente historia, sin malos (si hay algún malo serían los humanos, pero aun así no son los archivillanos y las ratas no les guardan rencor. Otro punto en el que demuestran ser superiores a los humanos.)
   Incluso cuando las ratas de Nimh llegan a un gran desacuerdo y algunos de sus miembros deciden separarse de la comunidad, todos lo aceptan sin oponerse deseándoles lo mejor en el nuevo camino que emprenden. No intentan superponerse a los otros, guerrear u oprimirlos por tener ideas diferentes. Aceptan sus divergencias y cada cual actúa como sus ideas les dictan.
   También en esta novela encontramos un canto reivindicando a las ratas y en general a los roedores. Estos son animales con muy mala fama e inmerecida. Comúnmente se las considera sucias (relacionándolas con las alcantarillas y los desperdicios) y portadoras de enfermedades (y por si aun hay algún mortal que no lo sepa, que conste que las ratas no fueron las culpables de la peste. No eran ellas las que la propagaban sino las pulgas que llevaban en su pelo. De lo que ellas no tenían culpa. Y por supuesto, ayudaba mucho a la propagación del virus la enorme falta de higiene que existía en la Edad Media y épocas posteriores).
   Los roedores son animales inteligentes, originarios del campo (que si una parte acabaron en las ciudades fue por necesidad), adaptables, que ayudan en la propagación de las semillas (todas esas ardillas y otros roedores que entierran frutos para formar sus pequeñas reservas y que algunas quedan olvidadas y acaban convirtiéndose en árboles) y sobretodo representan la base de la cadena alimenticia de los depredadores. Sin roedores los depredadores no podrían alimentarse y casi toda la estructura animal se desmoronaría.
   O´Brien quiere enseñar al lector que las ratas y ratones no son parásitos, sino miembros importantes del orden natural.
   Con respecto a la edición de Ediciones B, alabo que reeditaran este libro pero aunque es de tapa dura, que siempre resulta más atractivo y cómodo para leer, la portada no es gran cosa y no resulta muy atrayente ni para niño ni para adulto. Una portada más bonita hubiera ganado en lectores. Sí me ha gustado el detalle del ratón en la paginación, un toque monísimo.
   Una curiosidad a comentar, que me llamó la atención al leer la contraportada, es que esta novela se describe como una obra entretenida (que por supuesto que lo es) y llena de humor. ¿Llena de humor? ¿EN SERIO?
   Me quedé a cuadros al leer esto, no sé quien redactó la contraportada pero no creo que se leyera el libro porque si algo no tiene este libro es humor (no es que sea un drama pero risas fijo que no hay) incluso al final te conmueve y a mi estuvo a punto de arrancarme alguna lágrima (y no soy de fácil llorar XDD).
   Si esperáis un libro cómico, no os engañéis, este no lo es. Es una historia bella, entrañable, lleva de coraje (del de verdad, no del que lleva a un personaje a matar a todo el que pilla por delante XDD sino del que lleva a este a sacrificar su propia vida, si es necesario, por salvar a otros), generosidad, llena de descubrimientos y reflexiones que van mucho más allá del mero entretenimiento.
En resumen: la recomiendo a soñadores de todas las edades y a los grandes amantes de los animales y la naturaleza. Es una obra elegante, hermosa y llena de consejos para ser mejores individuos. Un libro que enamora y sin duda fondo de estantería 100 %.

Fondo de estantería  100%
Valoración: 5
Escala valoración: del 1 al 5






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2 comentarios:

Raquel Campos dijo...

Me lo anoto porque se que me va a gustar mucho!!

Besos!!

María Parra dijo...

Seguro que si!!!

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